Header Ads Widget

Monasterio de San Jerónimo de Buenavista - Sevilla II

 

 


Monasterio San Jerónimo de Buenavista I

Monasterio San Jerónimo de Buenavista II


La iglesia del complejo se levanta con estilo gótico flamígero ( última etapa del arte gótico que se desarrolla entre finales XIV hasta mediados del XVI. Se caracteriza por no contar con un centro difusor concreto lo que aumenta su diversidad. Sus características más pronunciadas son la profusión de la decoración sobre lo estructural, como los arcos decorados con motivos vegetales, uso de curvas y contracurvas, tracería ondulada en los vanos, arco conopial, bóvedas con múltiples nervios, en abanico o estrellados, torres con chapitel ). La misma poseía tres naves, con un ábside poligonal, portada a los pies de la nave principal, sobre ella el coro, y capillas laterales de planta cuadrada en muros de evangelio y epístola. Se conservan solo dos de estas capillas, con una anchura de unos 5 metros y una altura superior a 8 metros.

El monasterio fue reformado a mediados del XVI, se desconoce el nombre del arquitecto que realizo la modificación, pero se estima que pudiera ser Juan de Herrera, que participó en la erección de Monasterio de El Escorial por mandato de Felipe II, no hay que olvidar que dicho monumento nacional estaba gestionado también por los monjes jerónimos. Cambien se cree que las bóvedas pudieron ser realizadas por el arquitecto Diego de Riaño, maestro mayor de la catedral de Sevilla, y autor, entre otras, de la fachada trasera del ayuntamiento de Sevilla, o de la sacristía de los cálices.


 

A través de dos puertas se facilitaba la comunicación del templo con dos claustros, uno de ellos conservado aún, con medidas próximas a los 45 x 45 metros. Consta de dos plantas, la inferior con siete arcos de medio punto y la superior con otros siete arcos carpaneles ( similar al modelo existente en el Monasterio de San Isidoro deSevilla, el otro gran monasterio del extrarradio de Sevilla). Se observan pilares de planta cuadrada a los que se adosan semicolumnas que disponen de pedestal, siendo estas mayores en los laterales que en los frontales, lugar donde se apoyan los arcos indicados.

En la planta superior se utiliza el orden jónico ( columna dotada de basa, el fuste es de sección circular y presenta énfasis, tiene 24 acanaladuras o estrías. El capital se reconoce por dos volutas o espirales que lo adornan ) y en la planta baja el orden toscano ( el entablamento está compuesto por arquitrabe, friso y cornisa. El capitel es liso con listel, ábaco, equino, collarino y fuste liso ). en los deambulatorios, los arcos siguen el esquema de cada planta, medio punto en la baja y carpaneles en la superior.


 

Al claustro se abren 10 puertas, 8 en el piso bajo y dos en el superior. Las más antiguas son tres de estilo plateresco y están en el ala norte, dos se sitúan en los extremos este, conecta con la escalera principal, y al oeste, conecta con el compás y después con la cocina, la tercera esta en la planta superior y da acceso al coro alto.

Hay otras seis puertas en la planta baja, realizadas a continuación de las anteriores, en tres momentos diferentes. Estas puertas daban acceso a distintas dependencias.

Actualmente solo podemos ver la escalera por la que se accede al coro, el resto de dependencias han desaparecido. El coro esta a los pies de la nave de la epístola, la nave que nos encontramos a la derecha tal y como entramos en el templo. Se accede a la escalera por una de las puertas descritas, nos encontramos con un vestíbulo cubierto por una bóveda vaída casetonada. La doble altura del espacio de subida es cubierta por una cúpula con casetones de media naranja sobre pechinas. El vestíbulo superior, que da paso hacia el coro, la torre y el claustro alto, se cubre con una bóveda muy rebajada en óvalo sobre pechinas, y decoración de nervios concéntricos.


 

La torre servia como tribunas en la nave central de la iglesia. Su primer cuerpo es de estilo gótico, y seguramente rematase en una espadaña; en el siglo XVI se le añade el cuerpo de campanas que hoy conocemos. La torre se corona con un chapitel que se levanta, con forma de pirámide, sobre una bóveda cónica de ladrillo. A destacar que cuando el cenobio fue utilizado como fábrica de vidrio la torre fue vaciada en su interior para servir como secadero de las piezas realizadas en la fábrica, por ello se sustituyo la escalera original por una mas estrecha que es la que hoy se puede ver en su interior.

La imprenta se encontraba al nordeste del claustro este, contigua al ábside al iglesia. Eran dos alas con angulo de 90 grados que bordeaban un patio, cerrando el mismo por los lados opuestos el ábside de la iglesia y uno de los lados del claustro de levante.

En esta imprenta, por orden de Felipe II se imprimían las bulas papales a partir de 1574, el motivo no era otro que de haber sido impresas en el Escorial, hubiesen tenido que ser trasladadas luego a Sevilla para embarcar hacia las indias

En lo concerniente a las obras de arte del monasterio, es amplio el catálogo de ellas, y de gran calidad.

Pietro Torrigiano realizó la imagen de San jerónimo penitente entre los años 1522 y 1524 hoy en el Museo de Bellas Artes de Sevilla tras la desamortización de Mendizabal. Es una soberbia imagen del santo en barro cocido y policromado, su tamaño es mayor del natural y sirvió como precedente para establecer la iconografía del santo, de hecho, el propio Martínez Montañés utilizo el modelo en obras posteriores.



 

El mismo artista tallo la virgen de Belén que también se encuentra en el museo sevillano, una obra de virgen sedente con el niño, modelo de clasicismo sereno, muestra en su mano una manzana

también Juan de Valdés Leal intervino en la decoración del convento, entre los años 1656 y 1657 realizó una amplia serie de lienzos sobre la vida de San Jerónimo y de algunos santos y venerables de la orden para la sacristía del monasterio. Muchas de estas obras están hoy en día en el Museo de Bellas Artes de Sevilla, aunque otras se encuentran localizadas en importante museos como el prado de Madrid, o de Grenoble, Dresde, Dortmund.

Algunos de estos lienzos forman parte de la magna exposición que en honor de Valdés Leal se desarrolla estos días en el Museo de Bellas Artes de Sevilla, y allí pueden ser contempladas de forma única

 





 

La serie de la vida de San Jerónimo contemplaba los lienzos “Bautismo de san Jerónimo” “Las tentaciones de san Jerónimo”, “La Flagelación de san Jerónimo”, "san Jerónimo disputando con los rabinos”, "Muerte de san Jerónimo", entre otros.

Respecto a los santos y venerables podemos ver "Santa Paula"; "Fray Pedro Fernández Pecha"; "Fray Vasco de Portugal": "Fray Pedro de Cabañuelas"; "Fray Juan de Ledesma" y otros mas.





 

Mas adelante, entre los años 1770 y 1780 fue Juan de Espinal el que realizó 26 cuadros para este convento, entre ellos "El nacimiento de san Jerónimo"; "Bautismo de san Jerónimo"; "Ordenación de san Jerónimo"; "Las tentaciones de san Jerónimo"; "San Jerónimo y santa Paula fundado los conventos de Belén": "San Jerónimo asiste a la muerte de Santa Paula", y así hasta completar los 26 cuadros.



 









 

Publicar un comentario

0 Comentarios


Las referencias a personas o colectivos que aparecen en esta web figuran en género masculino, como género gramatical no marcado.
Cuando proceda, será válida la cita de los preceptos correspondientes en género femenino